Saltillo, Coah.- El Instituto Nacional de Migración debe investigar los presuntos actos de extorsión cometidos por elementos del Grupo Beta, contra migrantes que buscan asilo en Estados Unidos y que llegan a Acuña.
Los agentes del Grupo Beta deben proteger y defender los derechos humanos de los migrantes, brindarles orientación migratoria, rescate y primeros auxilios.
Sin embargo, explicó el diputado el diputado Emilio Alejandro de Hoyos Montemayor, se han convertido en un instrumento de extorsión para los indocumentados que buscan residencia en EU.
Los mismos migrantes han denunciado que funcionarios del Grupo Beta cobran 500, 700 y hasta mil 300 dólares por persona, para colocar los nombres encabezando esas listas, un sistema de numeración que los pone en la fila virtual para su cita con las autoridades migratorias, informo.
“Estas denuncias las han realizado los propios migrantes y sus familias una vez que ya están del otro lado de la frontera. En primer lugar, esto a todas luces es ilegal y, segundo, permite la institucionalización del tráfico de indocumentados por la vía del soborno”.
Ante la desconfianza por el manejo de las listas en Acuña, migrantes que viajan solos, aproximadamente 80, se han asentado en el Puente Internacional en espera de ser atendidos por las autoridades migratorias de Estados Unidos.
De 180 migrantes que permanecían en los tres albergues solo quedan 60 en el albergue Granjas del Valle y unos 40 deambulan por parques, espacios públicos o iglesias.
“Las autoridades municipales, en un acto humanitario, otorgan techo, alimento y servicios básicos a los migrantes que están a la espera de los trámites migratorios”.
“Sin embargo, no hay información de orientación legal que corresponde al propio INM y tampoco se ha realizado un censo de los migrantes que están ubicados en la frontera”, refirió.