Redacción.- Un niño de tan solo 8 años, identificado como Kevin no soportó que su abuelo le arrebatara el celular y terminó quitándose la vida en su domicilio en la Ciudad México.
El menor subió a su habitación enojado alrededor de las 17:00 horas del pasado martes y su familia pensó que se trataba de una rabieta más, pues en su cuarto se escuchaban gemidos y que “rompían y aventaban cosas”.
Pasadas las horas su hermana fue a ver si se le había pasado el coraje, sin embargo encontró a Kevin desvanecido y con la agujeta de uno de sus tenis en el cuello que amarró a su cama.
El pequeño ejerció tanta presión que en minutos perdió la vida indicaron las autoridades, quienes ya iniciaron una carpeta de investigación tras el lamentable suceso.