Luego del triste deceso de un bebé de un año y tres meses, que murió a causa de consumir una botella de líquido para limpiar aire secos, la fiscalía general del estado y la procuraduría de los niños niñas y la familia, investigan la situación.
De entrada, se trata de una muerte que no fue por causas naturales, sino por el envenenamiento por absorber un solvente químico, y se investigara si esto fue a consecuencia de la falta de cuidado por parte de los padres, o si pudo ser autónomo, si fuera así no constituye a un delito.
El ahora occiso responde al nombre de Emiliano Arenas de Jesús de 1 año y 3 meses, este se encontraba en su casa, en el número 810 de la calle Reyes en la colonia Bravo.
Sin embargo tras un descuido de su madre, tomó una botella con dicho líquido ácido para beberlo, esto debido a que su hermano Kevin de 6 años, lo había usado para limpiar una bicicleta.
