Arón Rodríguez de Lara, director de Servicios Regionales de la Secretaría de Educación en esta frontera, informó que los turnos matutinos están llenos y a diario llegan padres migrantes que desean inscribir a sus hijos a la escuela.
«Lo que hacemos es buscarles un espacio en los turnos vespertinos, porque la atención se las tenemos que dar, sin embargo, nos ocasionan otro problema: el de los libros de texto», agregó el profesor Rodríguez.
Este fenómeno no se presentaba antes, es apenas en este 2019 que a diario, desde que inició el ciclo escolar, todo septiembre y lo que va del octubre, que nos llegan tres o hasta cuatro padres queriendo inscribir a sus hijos en lo que resuelven su situación migratoria en Estados Unidos, concluyó.