El delantero Renato Ibarra abandonó el Reclusorio Oriente, por la puerta delantera del recinto y sin dar declaraciones, luego de que le fueron retirados los cargos por «Tentativa de Feminicidio» y «Tentativa de «Aborto».
Tras una semana detenido el ecuatoriano de 29 años, su defensa logró que continuará en libertad el proceso por «Violencia Familiar», en contra de su esposa Lucely Chalá y Karen Chalá, hermana de su conyuge.
Renato Ibarra estuvo una semana tratando de resolver un caso que inició con su retención en la Fiscalía de Tlalpan, pasó por el Reclusorio Norte y terminó en el Reclusorio Oriente de la Ciudad de México.
Uno de los factores que ayudó a la liberación del ecuatoriano fue el testimonio de su esposa, que rechazó ser agredida por el jugador del América en la segunda audiencia realizada este jueves.
Renato Ibarra fue vinculado por el delito de “Violencia Familiar” y propuso como medida alterna pagar la reparación del daño, por una cantidad que no se pudo revelar, para así obtener la suspensión condicional del proceso y en seis meses estará libre de todo cargo. Por ahora no puede salir del país.
Con rostro serio y rodeado de un tumulto de medios de comunicación, fue como el centrocampista dejó esta noche el Reclusorio Oriente, luego de vivir su segunda audiencia, que duró cerca de siete horas, mientras se definía su situación y la de cuatro de sus familiares que fueron detenidos hace una semana en la alcaldía Tlalpan.
Lucely Chalá y su defensa arribaron al lugar y en la misma señaló que Ibarra no la agredió, que al querer protegerse de las agresiones que recibía se dio la vuelta y no se percató de lo que ocurría en su domicilio. Además, alegó sentirse mal, por lo que partió del reclusorio cerca de las 5 de la tarde.
El jugador tuvo que esperar a salir, ya que durante el proceso se filtraron videos de la audiencia, lo que provocó el enojo de la juez Esperanza Ortiz, quien al enterarse de la situación suspendió la audiencia y pidió se investigara quienes fueron los responsables.
Fue al filo de las 22 horas que el jugador salió acompañado de sus familiares, los cuales intentaron protegerlo de los medios de comunicación.
Ahora, Renato deberá conocer su futuro en las canchas, ya que las Águilas decidieron separarlo del plantel “de forma definitiva”.