El macabro hallazgo ocurrió en un sitio cercano a unas lagunas de oxidación en el municipio de Santa Ana.
Por: Agencias
Sonora.- El grupo de Madres Buscadoras de Sonora, realizado un rastreo de fosas clandestinas en la región entre Santa Ana y Magdalena, al norte de Sonora, donde supuestamente encontraron más de 50 cuerpos humanos apilados y calcinados en una enorme hoguera.
El macabro hallazgo ocurrió este sábado por la tarde, en un sitio cercano a unas lagunas de oxidación en el municipio de Santa Ana.
Antes de las 11:00 horas, Milagros Flores, líder del colectivo Jóvenes Buscadores de Sonora, informó que criminales les habían impedido el paso a un punto de búsqueda.
Las y los jóvenes de Hermosillo, acudieron al llamado de las Madres Buscadoras de Sonora de Santa Ana, para ayudarles en un rastreo de campo donde tenían el reporte de dos cuerpos sepultados.
Una de las madres, iba por su hijo hacia el final de una pista clandestina. Así se lo habían asegurado en un aviso anónimo.
En el camino recibieron amenazas para que no avanzaran, luego criminales arrojaron –poncha llantas– unas púas metálicas en el camino para evitar que rastrearan por el lugar.
Al verse en peligro por la escasa seguridad que llevaban solicitaron el apoyo de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano.
Los colectivos unidos cambiaron de punto; había otro reporte. Ahí encontraron un enorme crematorio clandestino, donde estiman qué hay más de 50 personas calcinadas.
“Hay una gran cantidad de huesos, y pedazos de prendas de vestir de hombre y de mujer que no se alcanzaron a quemar, comentó Ceci Patricia Flores Armenta, líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora.
En el lugar, próximo a las lagunas de oxidación encontraron dos cuerpos enterrados en fosas clandestinas.
Mientras estaban en el hallazgo, la líder de las Madres Buscadoras recibió llamadas del gobernador Alfonso Durazo y la secretaria de Seguridad Pública, María Dolores del Río, quienes les enviaron apoyo de seguridad.
Octavio Grijalva delegado de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en Sonora, se puso a disposición del colectivo y el alcalde de Santa Ana, Francisco Avechuco les envió bebidas hidratantes.
Los colectivos unidos estuvieron escarbando en el lugar, descubriendo entre la tierra pedazos de tela, objetos diversos y fragmentos de huesos quemados.
El sitio fue acordonado y arribaron peritos de la Agencia de Investigación Criminal para apoyar en el levantamiento de los cuerpos y tratar de rescatar muestra de ADN para que el Laboratorio de Inteligencia Científica Forense pueda hacer comparativa genética e identificar a las víctimas.
El colectivo Madres Buscadoras de Sonora, antes de los hallazgos de este sábado 5 de febrero, del 4 de mayo a la fecha, habían localizado más de 670 cuerpos en fosas clandestinas y un número indeterminado de restos óseos calcinados.
