El simulacro de cierre del Puente Internacional número II, entre Piedras Negras, Coahuila y la ciudad de Eagle Pass, Texas; se coordinó entre las autoridades de los Estados Unidos y México con el propósito de practicar y medir las fuerzas con las que cuentan para contener un contingente de migrantes o de cualquier grupo de personas que intenten cruzar dicho puerto fronterizo sin autorización.
Lo anterior fue dado a conocer por el Teniente Coronel Intendente Diplomado Estado Mayor Jorge Arturo Sánchez Avilés, administrador de la Aduana de Piedras Negras, quien puntualizó que dichas acciones están apegadas al respeto de los derechos humanos, en apoyo al Instituto Nacional de Migración (INM) en el caso del lado mexicano.
“Y este es un ejercicio para saber en qué condiciones estamos y sumar fuerzas entre todas las dependencias”, indicó el funcionario federal, quien coordinó las acciones implementadas del lado mexicano en coordinación con elementos y unidades de diferentes dependencias federales, estatales y municipales.
Detalló que en este ejercicio participaron la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), a través de la 47 Zona Militar con sede en Piedras Negras; así como Policía Estatal, Policía Especializada Coahuila (PEC), los elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), la Policía Municipal y personal de la propia Aduana.
El simulacro tuvo una duración de 15 minutos, periodo en el que los elementos de la Aduana y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en ingles), realizaron el cierre total con la colocación de vallas; mientras que del lado mexicano se hizo un muro de contención con unidades y personal.
“El personal de hasta el frente es la Guardia Nacional, con la misión solamente de contención. No es una misión de choque, es contención solamente y al final hicimos una autocrítica entre los participantes para verificar que detalles tuvimos y cómo fue el acceso a la instalación, qué problemática y qué ventajas nos representa esta capacitación conjunta en caso de que haya un hecho real”, indicó Sánchez Avilés.
Precisó que la ventaja es que hay participación, hay mucha cooperación de las autoridades y hay un poder de convocatoria.
Estableciendo que tienen un grupo de comunicación, donde se citan y acuden en un tiempo de cinco a 10 minutos para estar en las instalaciones.