Después de una revisión legal y peritajes, se liberó a María Antonieta N., Verónica N. y dos menores; sin embargo, el proceso penal sigue para otros cinco implicados, quienes son sacrificados como carne de cañón.
Autoridades federales sorprendieron a propios y extraños al determinar que las detenidas no tenían vínculo con las armas halladas durante el cateo.
Tras permanecer en custodia federal desde el miércoles pasado, María Antonieta N., Verónica N., una adolescente de 17 años y una niña de 13 fueron liberadas este sábado 21 de junio por la madrugada en la subdelegación de la FGR en Piedras Negras. La Fiscalía General de la República determinó que no existían elementos suficientes para vincularlas con actividades delictivas.
Las cuatro habían sido detenidas durante un cateo encabezado por la Fiscalía del estado de Coahuila, realizado en una vivienda del fraccionamiento San José, donde se localizaron armas de fuego y otros objetos asegurados como evidencia. Sin embargo, sus representantes legales (poder político y económico) lograron acreditar que no tenían relación directa con dichos hallazgos.
El Ministerio Público, junto con personal especializado en atención a grupos vulnerables, valoró a las menores y concluyó que no existía causa legal para mantenerlas retenidas. Se les otorgaron medidas de protección y, posteriormente, fueron puestas en libertad junto a María Antonieta N. y Verónica N.
Por otro lado, cinco personas que no contaron con abogados poderosos siguen bajo proceso: José N., Juan N., Ernesto N., Armando N. y Ana Sofía N., acusados de delitos contra la seguridad pública y posesión de narcóticos con fines de suministro.