La presidenta Claudia Sheinbaum reafirmó este jueves que el gobierno de México mantiene una postura firme en materia de soberanía y no permite operaciones directas de agencias extranjeras de seguridad en su territorio. Con la DEA, ni a la esquina, enfatizó, al responder a un comunicado de la agencia antidrogas estadounidense que anunciaba el Operativo Portero como una colaboración con México.
Sheinbaum aclaró que no existe ningún acuerdo formal con la DEA y que cualquier convenio de seguridad bilateral se realiza únicamente con el Gobierno de Estados Unidos, no con agencias aisladas. Destacó que solo se llevó a cabo un taller en Texas con cuatro policías mexicanos, y reprobó el anuncio unilateral de la DEA sin previa coordinación.
La mandataria recordó que durante el sexenio anterior, tras el caso del general Salvador Cienfuegos, se establecieron límites claros a las operaciones de la DEA en el país, principios que su administración mantiene con consistencia. Afirmó que la única negociación en curso es con el Departamento de Estado y se basa en criterios de respeto mutuo, territorio y coordinación, sin subordinación.
Este desencuentro resalta la fragilidad en la relación bilateral en materia de seguridad, que se encuentra bajo revisión y requiere armonía institucional para funcionar con eficacia.
