El reciente anuncio de nuevos impuestos y cargas fiscales promovidas desde el Gobierno federal ha generado preocupación
Saltillo, Coah.- El reciente anuncio de nuevos impuestos y cargas fiscales promovidas desde el Gobierno federal ha generado preocupación entre empresarios, expertos y familias mexicanas, quienes consideran que esta medida afectará principalmente a los hogares que ya enfrentan altos costos de vida, un inflación persistente y un ingreso cada vez más limitado.
Aunque el Gobierno federal sostenía que no habría alza de impuestos en la actual Administración, la nueva Ley de Ingresos sí prevé aumentos para 2026.
De acuerdo con la Ley de Ingresos, que se aprobó en la Cámara de Diputados, se aumentará el IEPS a tabaco, bebidas saborizadas, así como a juegos y sorteos; además, se gravarán los videojuegos con contenido violento y las bebidas con edulcorantes no calóricos.
Con esto, se prevé una recaudación de 42 mil millones de pesos, la mayoría por el alza a bebidas saborizadas.
De acuerdo con la propuesta fiscal, se busca incrementar la recaudación bajo el argumento de fortalecer los programas sociales; sin embargo, en la práctica estos nuevos impuestos significarán aumentos indirectos en el costo de productos básicos, transporte, energía y servicios. Esto impactará especialmente a trabajadores, comerciantes, pequeñas empresas y emprendedores, quienes verán reducido su margen de ahorro y se verán obligados a recortar gastos esenciales como educación, salud y vivienda.
Especialistas en finanzas públicas coinciden en que, antes de imponer nuevos impuestos, el Gobierno debió transparentar el uso de los recursos actuales, combatir la corrupción interna y garantizar que el gasto público sea eficiente. En lugar de eso, se ha optado por una política recaudatoria que traslada la carga económica al ciudadano común.
Las preguntas en torno a estas medidas siguen sin respuesta: ¿por qué se exige más al contribuyente cuando no existen resultados claros en salud, educación y seguridad?, ¿quién garantizará que los nuevos ingresos fiscales no se destinen a fines políticos o electorales?, ¿cuántas familias deberán sacrificar su bienestar para cumplir con estas obligaciones fiscales?
‘Compren menos’
La presidenta Claudia Sheinbaum admitió este miércoles que el ajuste fiscal que podría impactar directamente a la población en 2026 será el incremento al impuesto de bebidas azucaradas, aunque consideró que su efecto puede evitarse si se reduce el consumo.
“¿Qué orientamos nosotros para que no afecte tu bolsillo? En vez de comprar 30 latas de refresco en un mes, compra 29. Esto te va a ayudar a tu salud y no vas a pagar más impuestos”, dijo.
Este miércoles, la subsecretaria de Egresos de la Secretaría de Hacienda, Bertha Gómez Castro, dijo a diputados que no se creará ningún fondo para etiquetar los recursos provenientes del aumento al IEPS para el combate a enfermedades provocadas por el consumo de refrescos.