El presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, Bernardo Bravo Manríquez, fue asesinado el lunes 21 de octubre en Michoacán. De acuerdo con autoridades estatales, el empresario no llevaba consigo personal de seguridad ni se trasladaba en el vehículo blindado que le había sido asignado.
Bravo Manríquez había denunciado en distintas ocasiones la extorsión que enfrentan los productores de limón en la región de Tierra Caliente. Su cuerpo fue encontrado dentro de su automóvil en un tramo de la carretera Apatzingán-Cenobio Moreno.
La Secretaría de Seguridad estatal confirmó que el líder citrícola tenía a su disposición elementos de custodia y un vehículo protegido, pero decidió realizar el trayecto sin ese resguardo. La Fiscalía de Michoacán ya abrió una investigación para determinar los motivos del ataque y si está relacionado con las amenazas previas contra empresarios agrícolas.