A través de su abogado, Teo N habría buscado a los padres de las adolescentes para ofrecerles cierta cantidad de dinero, al tratarse de familias de escasos recursos, a quienes además amenazaron con quitarles a sus hijas si es que interponían una denuncia.
Luego de que profesionales en materia penal cuestionaron por qué el caso no fue juzgado como trata de blancas, la Fiscalía del Estado argumentó que para imputar este delito se debía probar que el detenido prostituía a las jovencitas, sin embargo, de acuerdo a las indagatorias, las utilizaba para su propio placer sexual.
Alejandro del León Mendoza, coordinador de agentes del ministerio público, dio a conocer que el hecho de que la persona haya recuperado su libertad no significa que esté exenta de la acción de la justicia, pues la carpeta de investigación continúa abierta y de encontrar medios de prueba suficiente, se podría solicitar una orden de aprehensión en su contra.