Luego de los comentarios realizados en contra de la libertad de expresión, por parte del comandante Francisco Hernández, director operativo de la Policía Preventiva municipal, se giró una serie de instrucciones a sus subalternos para iniciar acciones en represalia contra los comunicadores independientes, los cuales hicieron publica su molestia contra los medios.
El elemento de la Fiscalía General del Estado incluso contactó con agentes del Ministerio Público y compañeros de la Policía Investigadora del Estado, ya que pretende cuadrar delitos de halconeo a todo aquel periodista que realice trabajo de investigación o que evidencie su mal actuar.
Se escuda en lo estipulado por el Código Penal vigente en el estado de Coahuila, para así transgredir los derechos de los periodistas de ejercer libremente la profesión de comunicadores.
Ante la amenaza, que de manera indirecta se hizo llegar a varios comunicadores sobre las acciones jurídicas a tomar por el mando policiaco, hay quienes ya iniciaron trámites ante la autoridad federal para solicitar seguridad personal, ante el temor de que ocurran más casos como el del periodista independiente Juan Nelcio Espinoza Menera, a quien las autoridades le arrancaron la vida y luego de ello, pretendieron ensuciar su reputación para justificar el motivo de su muerte.
Así es como se celebra la libertad de expresión en Coahuila, encarcelando y asesinando a periodistas “incomodos”, solo por evidenciar el mal actuar de las autoridades.
