Ante un juez federal de la Corte Corpus Christi en Texas, Jorge Juan Torres López, exgobernador interino de Coahuila, se declaró culpable del delito de lavado de dinero, por el que podría recibir una pena de 20 años de prisión, que se dará a conocer el 10 de septiembre.
Esta tarde se realizó una audiencia virtual en la que el exmandatario de 66 años aceptó su responsabilidad, como parte de un acuerdo para reducir su condena.
El político del Partido Revolucionario Institucional (PRI) fue extraditado a Estados Unidos en octubre de 2019 tras ser detenido en febrero de ese año en Puerto Vallarta, donde según reportes vivía en una urbanización de lujo.
Había sido imputado en 2017 por participar en un esquema de lavado de dinero que incluía delitos contra una nación extranjera, incluyendo soborno de un funcionario público y apropiación indebida, robo y malversación de fondos públicos por o para el beneficio de un funcionario público.
Según la acusación, Torres López operó con Héctor Javier Villarreal Hernández, su secretario de Finanzas, quien también ha sido procesado en los Distritos Sur y Oeste de Texas por delitos de lavado de dinero y aguarda su sentencia.