El gobierno de Guatemala decretó tres días de duelo nacional tras la volcadura de un tráiler que dejó 55 migrantes muertos en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México.
En un comunicado, el presidente Alejandro Giammattei dijo estimar que la mayoría de los fallecidos serían guatemaltecos y aseguró que su administración mantiene coordinación con el gobierno de México para agilizar la repatriación de los cuerpos.
Alejandro Giammattei adelantó que México hará un anuncio este lunes sobre la identidad de los fallecidos.
Agregó que el tráfico de migrantes es una actividad que lucra con la vida de las personas y aseveró que se trata de un negocio que genera por lo menos 4 mil millones de dólares al año.
Manifestó que las personas que emprenden el viaje con coyotes se arriesgan a ser víctimas de violación sexual, secuestro y trata.
El presidente de Guatemala también se refirió a la propuesta que presentó a las autoridades estadounidenses y mexicanas sobre endurecer las penas para quienes se dedican al tráfico de migrantes. Afirmó que la homologación de leyes en esa materia reforzaría la lucha contra esas estructuras.
Giammattei añadió que su gobierno tiene preparada una iniciativa de ley en la cual se plantean condenas de entre 30 y 50 años de cárcel para los traficantes de migrantes.
La propuesta es que aquellos que resultaran involucrados en la muerte de ciudadanos que buscan llegar de forma irregular a Norteamérica purguen 50 años, mientras que los descubiertos trasladando a personas de manera ilegal tengan un castigo de 30 años de privación de libertad, explicó.
