Tras una muy esperada reunión de gabinete donde los funcionarios iraníes discutieron la quinta y última fase de la reducción de sus compromisos nucleares, se decidió que Irán ya no se limitará a las restricciones establecidas en 2015 por el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA), según un comunicado de la agencia estatal de noticias IRNA.
«Irán establecerá sus límites en función de sus necesidades técnicas», dice el comunicado. «Irán continuará trabajando con agencias nucleares internacionales y volverá a los límites de JCPOA una vez que se eliminen todas las sanciones al país».
Los límites a las operaciones nucleares que se mencionan en el comunicado incluyen cumplir con los límites de enriquecimiento de uranio, la cantidad de material enriquecido e investigación y desarrollo asociados con operaciones nucleares.
Sin embargo, la decisión de Irán muestra un interés del país por dar un golpe de efecto sin salirse del acuerdo por el momento ya que tras la reciente escalada de tensiones a partir del asesinato del general Soleimani, se especulaba sobre una posible vuelta al enriquecimiento de uranio al 20%, algo que finalmente no se ha anunciado.
En el comunicado, Irán informó que seguirá sometiéndose «como antes» a inspecciones nucleares de la Organización Internacional de la Energía Atómica.