Saltillo, Coahuila.- En un acto que ha suscitado controversia, residentes de una colonia en Saltillo incendiaron la motocicleta de un joven, quien, según informes, había modificado el escape de su vehículo para aumentar su ruido, generando incomodidad y frustración entre los vecinos. La situación se volvió insostenible debido a las constantes perturbaciones, que incluían explosiones provocadas por el escape alterado, lo que llevó a un grupo de personas a actuar de manera drástica para resolver el problema.
El incidente se produjo cuando los vecinos, ya hartos de soportar el ruidoso comportamiento del motociclista, decidieron unirse y prender fuego a su motocicleta, eliminando así la fuente del ruido molesto. Esta acción ha generado un intenso debate sobre si se trata de un acto de desesperación social, una agresión o simplemente una manifestación del descontento colectivo de los habitantes de la colonia ante la falta de respuesta a sus quejas.
Las autoridades locales han tomado cartas en el asunto, pero las opiniones están divididas sobre la justicia o la justificación de este tipo de reacciones frente a la persistente violencia del ruido. Lo que resulta evidente es que este suceso resalta una creciente preocupación por el respeto a la convivencia vecinal y los límites del comportamiento individual en áreas residenciales.
