El sueño de tres mujeres nicaragüenses de llegar a Estados Unidos fue truncado por la muerte cuando la camioneta en la que viajaban volcó en Castaños
Castaños, Coah.- El sueño de tres mujeres nicaragüenses de llegar a Estados Unidos fue truncado por la muerte cuando la camioneta en la que viajaban volcó en Castaños y dejó además a 8 centroamericanos lesionados.
Ya habían recorrido municipios, estados desde que salieron de su país y cuando estaban a menos de 300 kilómetros de llegar a la frontera sufrieron el accidente que cobró la vida de las tres mujeres.
Los cuerpos de las víctimas fueron aplastados por la Chevrolet Silverado, color verde, con láminas del Estado de Nuevo León RH-57-05 mientras que el resto de los migrantes quedaron regados sobre el pavimento de la carretera 57.
El chofer de la unidad se dio a la fuga. Los heridos fueron atendidos en el Amparo Pape.
Llevan a lesionados al Amparo
La escena fue escalofriante para los socorristas, que al llegar encontraron a una mujer sin vida, su cuerpo aplastado por la llanta de la camioneta, además de ver a hombres y mujeres migrantes tirados en el asfalto y el pasto del camellón central.
Las autoridades policiacas explicaron que el accidente de la camioneta Chevrolet Silverado, color verde, con láminas del Estado de Nuevo León RH-57-05, circulaba de sur a norte ocurrió por el exceso de velocidad.
Presuntamente el conductor perdió el control del vehículo, que después dio varias vueltas aventando la tapa del camper que cubría a los migrantes que viajaban en la caja y arrojándolos al pavimento pasando por encima de ellos, dejando en el lugar a dos mujeres nicaragüenses, siendo identificada una de ellas como Isamar Medina, que viajaba con su esposo e hija, éstos últimos formando parte de los lesionados.
Según uno de los viajeros, el conductor responsable de la unidad, huyó, dejando a las personas tendidas en el sitio.
Los lesionados tras recibir la atención por parte de los rescatistas del municipio de Castaños así como de los paramédicos de Cruz Roja, fueron llevados al Hospital Amparo Pape de Benavides, donde a su ingreso sus estados de salud eran de gravedad.
