La escasa humedad y llegada de frentes fríos y rachas de viento, aumentan los riesgos de incendios forestales en serranías, por ello se implementaron acciones preventivas como la capacitación de 160 lugareños para integrar 20 Brigadas Rurales, que serán los primeros respondientes ante la presencia de algún siniestro en Coahuila.
Jorge Guerrero Salcedo, director de Vida Silvestre y Recursos Forestales de la Secretaría de Medio Ambiente (SMA), explicó que a iniciativa del gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís y de la titular de la dependencia, Eglantina Canales Gutiérrez, en su oportunidad se actualizó la preparación de estas brigadas.
Detalló que son ejidatarios que generalmente habitan en comunidades cercanas a serranías o zonas de bosque, quienes conocen el terreno y se comprometen a trabajar en favor del medio ambiente.
En los meses previos a la temporada de calor en coordinación con la CONAFOR, CONANAP y PROFAUNA se capacitó al personal para actualizar en conocimientos específicos con esquemas de organización para priorizar la seguridad de este personal, así mismo se capacitan constantemente a los 160 brigadistas rurales y los 450 elementos que participan en las labores de prevención y control convirtiéndose en los primeros respondientes en caso de algún incendio.
Sobre el particular, Guerrero Salcedo señaló que ante la práctica de quemas agrícolas también se convierten en asesores de productores para su correcta aplicación, y evitar que salgan de control con la consiguiente propagación.
Además, los brigadistas rurales comparten entre los agricultores lo que establece la Norma Oficial Mexicana (NOM) 015 de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
Ésta regula el uso de fuego en terrenos forestales y agropecuarios, además de establecer las especificaciones, criterios y procedimientos para ordenar la participación social y de Gobierno en la detección y el combate de incendios forestales, apuntó.
Añadió que en los dos primeros meses del año ya se presentaron 6 incendios forestales, con afectación de poco más de 160 hectáreas (principalmente de pastizales), en Nadadores, Zaragoza-Acuña y Ramos Arizpe.
Dos de ellos por tormentas eléctricas y los cuatro restantes por errores humanos, principalmente en quemas agrícolas, de ahí la relevancia de la capacitación de los brigadistas rurales, concluyó.