Estados Unidos concluyó ayer la primera fase del Proyecto Pitón, un operativo masivo para descabezar el entramado delictivo del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en EU y que consiguió el arresto de más de 750 miembros del grupo, además de la incautación de más de 20 toneladas de droga (la mayoría de metanfetaminas) y dinero por valor superior a 22 millones de dólares.
“El Proyecto Pitón es la acción más integral hasta la fecha en la campaña del departamento de Justicia para alterar, desmantelar y finalmente destruir el Cártel Jalisco Nueva Generación”, aseguró Brian Benczkowski, jefe de la Subdivisión Criminal del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Ha sido una operación de seis meses que terminó la madrugada del miércoles con un golpe final: la captura de 250 operadores y decomisaron 600 kilogramos de droga y 1.7 millones de dólares.
El proyecto también está atacando el tráfico de armas desde EU a México. El mes pasado se frenó el intento de miembros de esa organización delictiva de comprar 200 rifles de asalto y explosivos en California, con el objetivo, precisó el Departamento de Justicia, de contrabandearlos.
Con Joaquín “el Chapo” Guzmán entre rejas, la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) colocó al Mencho como su objetivo número uno, incluso por encima de los históricos capos Ismael “el Mayo” Zambada y Rafael Caro Quintero.
Para Benczkowski el CJNG es “uno de los más poderosos operando en Estados Unidos”, con centros de distribución en Los Ángeles, Nueva York, Chicago, Houston y Atlanta.
La DEA anunció ayer una acusación de reemplazo contra el Mencho por los cargos de “presunta empresa criminal” (delincuencia organizada). Además el Departamento de Estado emitió una recompensa de 10 millones de dólares por información que conduzca a su arresto.
