Mirna Celaya, su hermana, contó que tiene miedo de que las amenazas de muerte se hayan convertido en una acción real.
Por Agencias
Tijuana.- La mujer hondureña que desató indignación entre los mexicanos por haber rechazado un plato de frijoles en un albergue, se encuentra desaparecida desde hace ya cuatro días y su hermana, teme por su integridad.
Su hermana Mirna Celaya envió un video al HuffPost México para denunciar que desde el 20 de noviembre Miriam no contesta el celular y no se le ha visto integrada a la caravana migrante; no ha podido volver a comunicarse con ella y nada se sabe de ella ni de sus hijas pequeñas.
«No me he vuelto a comunicar con ella. Su teléfono está apagado. Le mando mensajes, le llamo y no contesta. No sé nada de mi hermana desde ese día», relata Mirna Celaya a un medio internacional.
Tras haberse dado a conocer el video en que desprecia la comida que le brindaron en el albergue, Mirian Celaya, grabó un video ante medios de comunicación en que pidió disculpas a los mexicanos.
Sin embargo, la indignación fue tal, que a través de las redes el discurso de odio la alcanzó y los comentarios fueron de exigirle a no volver a pisar México hasta incluso, amenazas de muerte.
«De corazón, les pido mil disculpas por todo lo que está sucediendo. Y mi hermana les pidió disculpas y, por favor, tóquense el corazón. Todos somos seres humanos, todos cometemos errores. Lo importante es que ella rectificó y pidió perdón… Quiero pedirle a los mexicanos que tóquense el corazón, tengan compasión de mi hermana…» dijo la hermana de Mirian.
El último mensaje que recibió de su hermana, fue uno de audio donde le decía: «Mi hermana, te quiero mucho. Te amo. Que sea la voluntad de Dios, no la mía ni de nadie, sino la de Él, ¿ok?»
«Mi hermana está corriendo peligro por todo lo que ha pasado, lo que ha pasado en las redes, amenazas, todos los memes que han subido de ella, las fotografías. Mi hermana es una persona humilde, no le hace daño a nadie, su único error fue eso que dijo, pero mi hermana pidió disculpas. Pidió perdón. Ellas están corriendo peligro» finalizó la familiar de la hondureña.
El teléfono de Mirian está apagado y sus acompañantes no la han visto. Su familia no sabe si está escondida de sus acosadores o si está a salvo aun en México.
