En Eagle Pass, al igual que todas las ciudades a lo largo de la frontera con México, preocupa que la crisis migratoria, en lugar de disminuir, va a empeorar con la revocación del Titulo 42, que es parte de una ley de Salud Pública establecida durante la pandemia para expulsar a los indocumentados por razones sanitarias.
La administración del presidente Biden ha determinado que para finales de mayo quede sin efecto el Título 42, por lo cual los extranjeros no podrían ser deportados por razones sanitarias, lo que motivará a que más migrantes viajen a la frontera para cruzar ilegalmente a los Estados Unidos.
El impacto puede ser devastador para las comunidades fronterizas y para todo el país, de acuerdo a las autoridades a nivel nacional que se oponen a la revocación de dicho título.
Jorge Antuna, gerente municipal de Eagle Pass, dijo que es necesario que las autoridades federales pongan orden para controlar el flujo migratorio y que el presidente Biden entienda que la crisis migratoria es algo muy grave para la frontera.
Mencionó que se espera se intensifique la llegada de migrantes, por lo que las diferentes corporaciones policiacas se preparan, principalmente la Patrulla Fronteriza.
Por Eagle Pass cruzan diariamente cientos de migrantes, y de manera reciente se ha elevado la presencia de personas originarias de Colombia, Venezuela y Cuba, en muchos casos son familias enteras que atraviesan el río Bravo.