La ciudad de Nueva York abrirá dos albergues para los migrantes que sean enviados por el gobernador republicano de Texas, en una disputa política sobre la seguridad fronteriza, dijo este jueves el alcalde Eric Adams.
Los albergues brindarán refugio, alimentos y atención médica mientras trabajan para conectar a los migrantes con familiares y amigos dentro y fuera de la ciudad de Nueva York, según indicó su despacho del alcalde.
Los centros de ayuda hacen parte de los esfuerzos de los alcaldes demócratas para hacer frente a los miles de migrantes que son transportados en bus desde los estados fronterizos de Texas y Arizona, liderados por los republicanos.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, un republicano que busca la reelección en noviembre, ha transportado en autobús a más de 11 mil migrantes a Washington, Nueva York y Chicago desde abril.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, envió la semana pasada a unos 50 migrantes de Texas a Massachusetts.
Los gobernadores, que se oponen a las políticas fronterizas más indulgentes del presidente estadounidense, Joe Biden, dicen que quieren trasladar la carga a las áreas lideradas por demócratas y se han enfocado en el tema en el período previo a las elecciones intermedias de noviembre.
“Mientras otros líderes han abdicado de su deber moral de apoyar a los solicitantes de asilo que llegan, la ciudad de Nueva York se niega a hacerlo”, dijo Adams en un comunicado.
Nueva York está obligado por un decreto de consentimiento —vinculada a antecedentes jurídicos— a proporcionar refugio a las personas sin hogar.
En las próximas semanas se abrirá en Bronx un albergue para personas mayores que se encuentren solas, dijo la oficina del alcalde, y se completará la apertura de un segundo sitio. Podrían abrirse más instalaciones de ser necesario.