‘El Señor’ el 22 de septiembre de 2018 se declaró culpable por cargos de narcotráfico y de lavado de dinero del Cártel de Sinaloa
Ciudad de México.- La Fiscalía General de la República (FGR) capturó e ingresó a un penal federal a Víctor Manuel Félix Félix y/o Raúl Castro Rodríguez, El Señor, consuegro del capo Joaquín El Chapo Guzmán, quien fue deportado por el gobierno de Estados Unidos el pasado 2 de mayo, y al que se le acaba de dictar auto de formal prisión.
En 2018, la jueza Marilyn L. Huff, de la Corte del Distrito Sur de California, con sede en San Diego, condenó a El Señor a 14 años y seis meses de prisión, quien el 22 de septiembre del mismo año se declaró culpable por cargos de narcotráfico y de lavado de dinero del cártel de Sinaloa.
La juzgadora pensó que la condena empezaría a contar desde el arresto de Félix Félix , en marzo del 2011, por lo que El Señor sólo debía cumplir siete años de cárcel en Estados Unidos. Sin embargo, por mostrar buena conducta fue liberado.
El 2 de mayo, los agentes norteamericanos lo deportaron por el Puente de San Ysidro, en Tijuana, Baja California, y elementos de la Policía Federal Ministerial, adscritos a la Agencia de Investigación Criminal (AIC), dieron cumplimiento a la orden de aprehensión que existía contra de Víctor Manuel Félix quedando interno en el Centro Federal de Readaptación Social Número 14 Durango.
La Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), lo imputó por ser probable responsable de los delitos de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El juzgado Primero de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de Tamaulipas con sede en Matamoros, dictó prisión formal al considerar que hay indicios de que es presunto responsable de dichos delitos.
Al procesar se le vincula con una organización delictiva, para la que presuntamente realizó movimientos bancarios en Texas, Nueva York, y California en Estados Unidos; así como Cancún, Guadalajara, y en la Ciudad de México. Para ello, se cree que utilizaba casas de cambio y empresas mercantiles para ocultar la procedencia de los recursos.