El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prometió que trabajará con el gobernador de Texas, Greg Abbott, para continuar con la construcción del muro fronterizo con México.
En el discurso inaugural, el mandatario recordó que cuando construyó la primera parte del muro no le encantó porque quería que fuera construido de un bonito hormigón prefabricado; sin embargo, le dijeron que si le avientan ácido se podía desintegrar, además de ser un material mucho más fácil de escalar.
Trump explicó que el muro, que es de 919 kilómetros, cuenta con un panel antiescalador, así como hierro difícil de cortar.
El republicano aseguró que el muro fronterizo ayudó a contener la migración durante su administración y que continuará construyéndose de15.24 metros de altura en el aire y secciones de 9.14 metros, de acero y concreto.
Durante su primer mandato, Trump empezó la construcción de un muro fronterizo entre México y Estados Unidos con el objetivo de mitigar la migración desde su país vecino. En diciembre, anunció que en este segundo periodo continuaría con esta política, a pesar de ser más caro que hace ocho años.
El mandatario dijo en su primer gobierno que México debería de pagar el muro fronterizo; sin embargo, él terminó absorbiendo los gastos.
