Piedras Negras, Coahuila – El diputado local de la región Laguna, Antonio Attolini Murra, fue avistado hoy en la sala de regidores, donde se reunió con el primer regidor Ricardo Muzquiz. Aunque la cita comenzó con un tono cordial, rápidamente se centró en las crecientes diferencias entre Muzquiz y el alcalde Jacobo Rodríguez, lo que ha generado preocupación en las altas esferas políticas de Morena. Esto se debe a que el primer regidor posee información sobre diversos eventos turbios que involucran al alcalde, incluyendo financiamientos de dudosa procedencia para su campaña y facturaciones que benefician a políticos del partido.
Estas revelaciones han puesto nervioso al alcalde Rodríguez, quien teme que la información en poder de Muzquiz pueda salir a la luz. Fuentes cercanas al encuentro indicaron que la conversación, que en un inicio parecía amistosa, se convirtió en una especie de llamada de atención para Muzquiz. Testigos presentes afirmaron que la intervención de Attolini fue vista como un intento de mediar en el conflicto y de poner fin a las tensiones que han surgido en la administración municipal, sugiriendo que ambas partes deberían evitar “levantar más polvo”.
Attolini, al ser abordado por los medios, subrayó que su visita no tenía otro propósito que el de saludar a amigos y conocer más sobre los diferentes departamentos de la presidencia municipal. Sin embargo, el impacto de su presencia fue innegable, dejando a Muzquiz en una posición incómoda, casi “silenciado” ante la autoridad del diputado lagunero.
La situación ha generado un amplio debate entre los regidores, quienes se cuestionan si esta intervención marcará un cambio en la dinámica política del municipio o si, por el contrario, intensificará las diferencias existentes. La visita de Attolini ha dejado claro que las tensiones en el gobierno local siguen latentes y que los actores políticos deben encontrar una forma de resolver sus diferencias para el bienestar de la comunidad.
El futuro de la relación entre el regidor Muzquiz y el alcalde Rodríguez sigue siendo incierto, pero lo que es evidente es que la intervención de Attolini ha puesto de manifiesto la fragilidad de la unidad dentro del cabildo. La comunidad estará atenta a los próximos movimientos de estos políticos, que podrían definir el rumbo de la administración municipal en los próximos meses.
