Ambos sujetos son reconocidos en México por operar financieramente y políticamente en la región norte de Coahuila para el diputado del Partido del Trabajo, Ricardo Mejía Berdeja.
San Antonio, Texas.— Agentes del Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas incautaron, en dos operativos recientes, más de $100,000 en efectivo a ciudadanos mexicanos originarios de Piedras Negras, Coahuila, durante detenciones de tráfico en la interestatal I-35, al norte de Austin.
El primer arresto y aseguramiento se registró el 29 de marzo, cuando un oficial de Lacy Lakeview descubrió $48,000 escondidos en un vehículo durante una detención de tráfico. El segundo operativo, registrado el 30 de agosto, involucró a José, de 32 años, originario de Culiacán, Sinaloa, pero con residencia en Piedras Negras, Coahuila. Fue detenido por exceso de velocidad y por lavado de dinero. Los oficiales incautaron $27,160 en efectivo que llevaba ocultos bajo su ropa. Tras su arresto, fue entregado a oficiales de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Una investigación relacionada reveló que el padre de José, José Guillermo, con domicilio en Eagle Pass, Texas, pero residente de Piedras Negras, Coahuila, fue detenido en un operativo independiente en la I-35. José Guillermo conducía un Nissan modelo 2020 a 75 mph en una zona limitada a 65 mph. Durante la revisión, un oficial canino alertó sobre actividad sospechosa y se localizaron cuatro paquetes sellados al vacío con aproximadamente $75,000 en efectivo escondidos debajo de la alfombra y del tablero del vehículo. Fue acusado de lavado de dinero y permaneció detenido sin derecho a fianza por retención migratoria.
El fiscal de distrito del condado de McLennan, Josh Tetens, señaló que estas incautaciones están entre las más grandes del condado y que, bajo la ley estatal, los fondos incautados vinculados a actividades ilegales pueden ser utilizados por las agencias de seguridad para combatir el crimen. De acuerdo con la normativa local, la oficina del fiscal retiene aproximadamente el 30% de los fondos, mientras que el 70% restante regresa a la agencia que realizó la incautación.
“Los fondos de confiscación de activos brindan a las agencias locales los recursos necesarios para adquirir equipos y capacitación en la lucha contra pandillas, trata de personas y delitos cibernéticos”, explicó Tetens.
Con estos operativos, las autoridades buscan reforzar la seguridad y prevenir el tráfico de grandes sumas de dinero relacionadas con actividades ilícitas en la región norte de Texas.
