Contienen oleada en NL; acuerdan con EU deportaciones ‘exprés’
La crisis migratoria que se vive en Piedras Negras cumplió ayer 10 días con la llegada de una nueva caravana de 2 mil migrantes, que procedía de un carguero detenido varios días en Monterrey, mientras ayer por la tarde se advirtió de la llegada de otro grupo con mil extranjeros indocumentados que buscaban cruzar a Eagle Pass a como dé lugar.
Asimismo, en Escobedo, Nuevo León, se advirtió que un grupo de entre mil y 2 mil migrantes esperaba el avance de los vagones hacia Coahuila, mientras otros iniciaron la marcha a pie, intentando cruzar el estado, aunque las autoridades de Nuevo León indicaron que atendieron a más de 500 ayer.
De acuerdo con los reportes de autoridades estatales en Coahuila, la primera caravana que arribó ayer a Piedras Negras fue captada cerca de las 10 de la mañana, cuando se bajó del tren a la altura del rancho El Fénix y caminó paralela a la carretera federal 57, donde autoridades estatales, federales y municipales apoyaron en las revisiones y su acompañamiento, para enfilarlos hacia el río Bravo y evitar que saturaran los albergues y refugios en Piedras Negras.
Autoridades estatales y federales coordinan el bloqueo de más trenes para impedir que los migrantes sigan llegando, por lo que Ferromex, el Ejército y la Guardia Nacional reforzaron los controles en las vías que conectan a Piedras Negras con ciudades como Monclova y Monterrey.
Mientras tanto, de acuerdo con reportes de CNN, México acordó con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EU (CBP, por sus siglas en inglés) “despresurizar” las ciudades del norte de México que limitan con Eagle Pass (Piedras Negras), El Paso (Ciudad Juárez) y San Diego (Tijuana), con deportaciones “exprés” de migrantes y llevando a cabo una serie de acciones para evitar que se utilice el sistema ferroviario para llegar a la frontera con Estados Unidos.
Autoridades de Coahuila y Eagle Pass sostendrán hoy de nueva cuenta una reunión binacional para evaluar la crisis fronteriza provocada por las caravanas de migrantes, y analizar la posibilidad de reapertura del Puente Internacional 1 o si se prolonga ese cierre.
Baja INM del tren a indocumentados
Hacia la tarde de ayer, decenas de carros tanque de la empresa Greenbrier GIMSA (antes Gunderson), además de vagones de carga de la compañía norteamericana Union Pacific y algunas góndolas ferroviarias, permanecían detenidos en los patios de Ferromex, en el municipio de Frontera.
Trabajadores vistos en el área comentaron que desconocían si los diferentes carros y vagones serían movidos ayer mismo, aunque destacaron que durante toda la mañana no había habido desplazamiento de trenes ni hacia el sur ni hacia el norte.
Tras el arribo el pasado martes de alrededor de 3 mil migrantes a la Región Centro, la empresa Ferromex emitió un comunicado, en el que señaló que el movimiento de trenes de carga en diferentes puntos del país -incluido Coahuila- sería suspendido de manera temporal.
Lo anterior, precisamente, para proteger la integridad de las personas indocumentadas que viajan “de trampa” en los vagones, para llegar a la frontera y cruzar hacia Estados Unidos.
Desde un puente peatonal que conecta las colonias Americana y Occidental, en la Ciudad del Riel, se apreciaban ayer por la tarde las decenas de carros tanque, góndolas y vagones detenidos; además de algunos más en movimiento que llevaban placas de acero.
Cabe mencionar que -al igual que el tramo ubicado en los límites de Monclova y Castaños, a donde llegó el contingente migrante la semana pasada- el paso a desnivel de la colonia Occidental también lucía desierto este domingo, sin migrantes y sin vagones de tren, cuando suele ser un punto de considerable congregación de indocumentados.
Fue el pasado martes que niños, jóvenes y adultos provenientes de países del sur llegaron en masa a bordo de los vagones de carga, cuya locomotora se detuvo a espaldas de la empresa Aceros Tepotzotlán, cerca del Libramiento Carlos Salinas de Gortari y una mina de dolomita.
Algunos de los migrantes comentaron entonces que la locomotora supuestamente fue desenganchada porque algunos de sus compañeros abrieron la puerta de uno de los vagones para guarecerse de los rayos del sol y el intenso calor, lo que causó que se activara una alarma.
Trabajadores de un rancho cercano, al que algunos migrantes llegaron el día de su arribo para descansar y recibir agua para beber y bañarse, reiteraron que ya no han visto pasar indocumentados, destacando que los últimos se retiraron del área la madrugada del jueves.
Cabe destacar que en el sitio fue vista ayer una unidad de seguridad privada de Ferromex, cuyos elementos se mantienen vigilando el espacio.
