Las palabras del Secretario de Gobierno de Coahuila, le hacen a los traficantes lo que el viento le hace a Juárez
Saltillo, Coahuila; 17 de noviembre de 2024 – Ante el creciente flujo de personas migrantes que buscan ingresar a Estados Unidos, el Secretario de Gobierno, Óscar Pimentel González, anunció la implementación de un plan de contención migratoria en el estado. Este esfuerzo responde a la preocupación por un posible aumento en la migración, especialmente antes de la asunción de Donald Trump como presidente en el país vecino.
“No permitiremos la acción impune de los traficantes de personas; y estaremos atentos ante un posible paso masivo de personas, atendiendo los lineamientos de derechos humanos, cuidando la seguridad y economía de Coahuila”, afirmó Pimentel durante una conferencia de prensa. El funcionario destacó que la determinación del gobernador Manolo Jiménez es ampliar y reforzar los operativos para detener a los “polleros” que organizan el cruce ilegal de migrantes, convirtiendo el tráfico de personas en una actividad delictiva.
El plan incluye una intensificación de la coordinación con el Instituto Nacional de Migración, el Ejército y la Guardia Nacional, con el objetivo de reforzar la vigilancia en todos los trayectos del flujo migratorio y en los puntos de rescate humanitario ya establecidos. Además, se ampliará la presencia de la policía estatal en las ciudades fronterizas, y se tomarán acciones en contra de quienes lucran con la migración.
“No bajaremos la guardia y habremos de actuar con oportunidad y firmeza contra la delincuencia que pretende beneficiarse de las personas migrantes”, subrayó Pimentel.
Sin embargo, la situación en la práctica parece ser diferente. Fuentes locales han señalado que algunos traficantes de migrantes, como Diego Emanuel Martínez Ayala, operan con impunidad desde Monterrey, Nuevo León, utilizando sus influencias para cruzar Coahuila sin ser molestados. Esta realidad pone en entredicho las declaraciones del secretario de gobierno, sugiriendo que las palabras de Pimentel podrían no tener el impacto esperado en la lucha contra el tráfico de personas, quedando solo en circo maroma y teatro.