«En los lugares que ellos acostumbran a estar como en las afueras de la casa del migrante y de la central de autobuses, los números han bajado, pero si se encuentran en casas que son reportados por vecinos a Seguridad Pública», dijo.
Agregó que se ha estado hablando con el encargado del área de seguridad de ferrocarriles mexicanos y ellos a su vez solicitan apoyo de Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración pero que todavía falta mucho por hacer para evitar que los migrantes se transporten de forma irregular en el tren.
Sobre la central de autobuses indicó que no hay un chequeo por parte del instituto Nacional de Migración ni en la garita del kilómetro 53 y mucho menos en los retenes y centrales.
«Siendo ellos la máxima o única autoridad facultada para la revisión de migrantes, pues estamos atados de manos y más con la presencia de organismos como derechos humanos que lo único que hacen es cuidar que si el migrante hace un desmán, no se actúa en contra de ellos».
Menchaca González indicó que no hay presencia del INM en la ciudad.
Además, dijo que sigue llegando gente que es deportada de los Estados Unidos en forma repetitiva, muchos de los que devuelven, siguen intentando cruzar y luego de deportarlos lo vuelven a intentar.