Luego del ataque recibido en su base de operaciones, elementos de Fuerza Coahuila salieron en persecución de los sicarios, pero dispararon a diestra y siniestra contra vehículos de inocentes, siendo un adulto mayor el más afectado, la recibir una ráfaga de disparos en su vehículo, que por fortuna no lo hirieron.
Según los primeros reportes, los elementos del Estado tras el ataque a balazos que recibieron, salieron en busca de los agresores al tener identificados los vehículos en los que perpetraron el ataque.
Sin embargo, dispararon en contra de varios vehículos que les parecían similares a los utilizados por el comando, siendo así que rafaguearon a un adulto mayor que llegaba a cargar gasolina en el Libramiento Carlos Salinas de Gortari a la altura de la colonia Occidental.
Los gritos de auxilio del hombre y en los que aseguraba a los oficiales que le disparaban que él era inocente, hizo que las balas se detuvieran, pues los uniformados se dieron cuenta que se habían equivocado.
Al ver el garrafal error que cometieron, alegaron que su vehículo presentaba las mismas características de los sicarios.
La gasolinera fue acordonada por algunos momentos ya que también esta presentaba impactos de bala, pero tras una simple disculpa, los elementos de Fuerza Coahuila se retiraron, dejando al hombre muerto de miedo y con su vehículo, un Kía Forte color blanco, de reciente modelo, dañado por los disparos.
La situación se repitió en calles de La Sierrita, donde algunos vecinos indicaron que habían recibido en sus viviendas impactos por parte de las patrullas de Fuerza Coahuila.
