De septiembre a la fecha, se han celebrado 42 matrimonios entre mexicanas y haitianos esto según reportes de las oficinas del registro civil de Chiapas, Baja California, Chihuahua, Tamaulipas, Puebla y Guanajuato.
Los caribeños pagan entre 20 y 30 mil pesos por contraer matrimonio con mexicanas en un lapso de un año, esto con el fin de regularizar su situación legal en nuestro país, además de tener mejores oportunidades de ingresar legalmente a los Estados Unidos.
Al contraer nupcias con una mujer de nuestro país, estos extranjeros adquirirán la nacionalidad azteca y podrán andar libres por nuestro territorio.
Y aunque suene mal, este trámite es totalmente legal pues según el articulo nueve de la Ley de Migración dice que “los jueces u oficiales del Registro Civil no podrán negar a los migrantes, independientemente de su situación migratoria, la autorización de los actos del estado civil ni la expedición de las actas relativas a nacimiento, reconocimiento de hijos, matrimonio, divorcio y muerte”.
Uno de estos casos es el de Luisa, quien viajó desde la Ciudad de México a Tapachula el mes pasado para contraer matrimonio con Leroi, originario de Haití, a cambio de 25 mil pesos y los gastos del traslado.
Luisa dijo estar consciente de la situación e incluso aseguró no sentirse ni siquiera atraída por quien será su nuevo esposo. “A lo mejor no está bien, pero si yo le puedo ayudar y él a mí, no le veo lo malo”, afirmó Luisa quien prefirió abandonar su trabajo en un call center para trasladarse a Chiapas a casarse con Leroi.
El aumento de los matrimonios por conveniencia coincide con el anuncio del gobierno de Joe Biden, el 18 de septiembre, de aplicar la política de deportación masiva de migrantes procedentes de Haití que lograron ingresar a Estados Unidos desde México.