La ciudad Matanzas, en el oeste de Cuba, vive con angustia este sábado ante el incendio de dos tanques de petróleo en una zona industrial que hasta el momento deja 17 desaparecidos y 77 heridos por quemaduras.
Un nuevo balance publicado por el diario oficial Granma elevó a 77 el número de heridos que provocó el siniestro, incluidos tres en estado crítico, otros tres muy graves y 12 graves.
Asimismo, se reportan 17 desaparecidos, «bomberos que estaban en la zona más cercana» al incendio, informó la presidencia, que añadió que Cuba solicitó ayuda y asesoramiento a países amigos con experiencia en el tema petrolero.
La extinción del incendió aún puede tardar», comentó en Twitter el presidente Miguel Díaz-Canel, mientras que el director de Comercio y Suministro de la estatal Unión Cuba-Petróleo (Cupet), Asbel Leal, precisó que el país nunca había enfrentado un incendio de la magnitud que tenemos hoy.
El fuego se desató el viernes por la tarde después de que a las 19:00 locales un rayo impactara en uno de los tanques de la base de supertanqueros situada a las afueras de Matanzas, 100 kilómetros al este de La Habana. A las 05:00 de este sábado el fuego se extendió a un segundo depósito.
Salimos corriendo
Se sintió el estruendo, como una ola de aire que te llevaba para atrás, dijo a la AFP Laura Martínez, vecina de la comunidad de La Ganadera, a unos dos kilómetros de la zona del siniestro.
Mario Sabines Lorenzo, Gobernador de Matanzas, informó de que hay alrededor de 800 evacuados.
Cuando ocurrió la primera explosión, Yuney Hernández y su familia abandonaron su casa en La Ganadera. Regresaron «como a las tres y pico de la madrugada» porque los niños tenían sueño, explicó esta mujer de 32 años a la AFP.
Pero sobre las 05:00 comenzaron a escuchar más explosiones, «se sentía como si estuvieran cayéndose los pedazos del tanque», agregó.
Ginelva Hernández, de 33 años, vive en la misma comunidad con su esposo y tres hijos. «Nos acostamos como a las 3:30 y a las 4:45, se sintieron los bombazos, como estruendos. Nos tiramos de la cama, cuando salimos a la calle el cielo estaba amarillo», contó la mujer a AFP. Está incontrolable el miedo de la gente en la calle, apuntó.
Según Cupet, el primer depósito «contenía unos 26 mil metros cúbicos de crudo nacional, alrededor del 50% de su capacidad máxima», cuando fue impactado por el rayo. El segundo depósito tenía 52 mil metros cúbicos de fuel oil.
Fallo del pararrayos
Al parecer se produjo un fallo en el sistema de pararrayos, que no pudo soportar la energía de la descarga eléctrica, según Granma.
Danger Ricardo, un soldador de 37 años que trabaja en el lugar, no se explica cómo falló el sistema de pararrayos de los tanques.
Los dos tanques abastecen la termoeléctrica Antonio Guiteras, la mayor de Cuba, pero el bombeo hacia esa planta no se ha detenido, añadió Granma.
Dos helicópteros comenzaron a trabaja en las tareas de extinción el sábado por la mañana frente a la bahía de Matanzas, una ciudad de 140 mil habitantes.
Grupos de bomberos agotados se concentraban afuera de la planta a la espera de poder entrar a buscar a sus compañeros que no pudieron salir en el momento de la segunda explosión.
El incendio se produce en momentos en que la isla sufre desde mayo pasado dificultades para satisfacer la mayor demanda de energía debido al calor veraniego.
La obsolescencia de sus ocho termoeléctricas, roturas, mantenimientos programados y la falta de combustible lastran la generación eléctrica.