Mauro Marrero García, de 34 años, relató que se encontraba en su domicilio de la colonia Buenos Aires, al sur de la ciudad, cerrando la venta de una camioneta de su propiedad cuando los agentes aparecieron repentinamente, afirmando que el vehículo contaba con reporte de robo.
Ante las acusaciones, el propietario señaló que la camioneta contó con ese reporte, pero que en la actualidad ya se encontraba inscrita bajo el rubro de vehículo recuperado.
“Les comenté que me esperaran, por lo que ingresé al domicilio para buscar mi teléfono e intentar hablar con el dueño anterior”, contó Marrero y agregó que lo siguieron hasta el interior de su casa.
Minutos después más elementos de Fuerza Coahuila llegaron y agregaron más acusaciones en su contra, entre las que destacaba la de dedicarse al narcomenudeo.
“Yo no vendo drogas, no consumo drogas, no tengo vicios”, apuntó el afectado.
Tras exigir un requerimiento oficial para su detención, los uniformados reaccionaron de forma violenta, utilizando la fuerza para someterlo.
Vecinas de Mauro fueron testigos de la violencia con la que los elementos lo sometieron.
“A puras patadas y golpes lo traían, le querían lastimar las costillas”, aseguraron las mujeres.
El afectado alcanzó a retornar el dinero a los interesados en su camioneta y solicitó a su vecinas que cuidaran de su hija, pero una mujer, agente de la Pronnif, le arrebató la mano de la pequeña, quien asustada fue ingresada a un vehículo oficial.
La camioneta en disputa fue remolcada.
Luego de 36 horas, Mauro recobró su libertad al pagar una fianza de 806 pesos por concepto de infracción por el delito de riña en vía pública.
“Yo no me peleé con nadie, no hice nada; solamente quería vender mi camioneta para comprar otro auto y regresar a trabajar a Sonora, donde mi hija estudiará y yo trabajaré en la planta de empalmes”.
Sin embargo, a su salida de los separos de la comandancia municipal le informaron que Janet se encontraba bajo la custodia de la Pronnif.
“Voy a pelear por mi hija, ella es todo para mi… soy papá soltero”.
Ante la serie de arbitrariedades y anomalías cometidas en su contra, Marrero Ojeda aseguró que interpondrá la denuncia correspondiente ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, así como ante la autoridad indicada.
