El precinto 4 del condado Harris recibió múltiples quejas de una vivienda en la que aparentemente se ejercía la prostitución.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron a una niña, de 7 años, viviendo en condiciones deplorables. “Esa vida era todo lo que la niña conocía”, dijo la policía.
Texas. – El precinto 4 de la oficina del sheriff del condado Harris realizó una operación encubierta contra una red de prostitución que operaba desde una vivienda ubicada al noreste de la ciudad de Houston.
Las autoridades recibieron múltiples reportes de un posible caso de prostitución en una casa ubicada en la cuadra 6100 de Jadecrest Ct. Los investigadores se hicieron pasar por clientes y llegaron a un acuerdo con la sospechosa de recibir diferentes servicios sexuales por la cantidad de $100.
La mujer les dio su dirección y les explicó cómo llegar y también les proporcionó una página de internet que mostraba los medicamentos que tomaba para prevenir enfermedades de transmisión sexual.
Los investigadores llegaron a la vivienda y se reunieron con la mujer que fue identificada como Rose Colton, de 39 años, y hallaron a una niña, de 7 años, que estaba presente junto con el esposo de la sospechosa, Richard Colton, de 71 años, que estaba armado.
Se encontró que la niña vivía en “condiciones horribles”, dijo el agente Mark Herman: la menor de edad dormía entre la suciedad y armas de fuego. Y según los agentes, la niña había estado en la misma habitación donde su madre realizaba actos sexuales por dinero.
Además, no era un ambiente para un menor de edad, los vecinos dijeron a ABC que veían a mucha gente entrar y salir de la casa a altas horas de la noche.
La pareja Colton fue arrestada en Houston, enfrentan cargos por poner en riesgo a un menor. Rose también tiene un cargo por prostitución y se le fijó fianza en total por $10,000 y Richard tiene una fianza de $15,000.
La niña está bajo la custodia de Servicios de Protección al Menor (CPS por sus siglas en inglés).
”Esa vida era todo lo que la niña conocía, se le hacía algo normal, no vamos a permitir que le hagan esto a una niña de 7 años”, dijo Mark Hermann, jefe del precinto 4 del condado Harris y agregó que la pareja podría enfrentar más cargos.