Tras una serie de audiencias con los más de 60 ciudadanos que se quejaron ante la PROFECO por los daños en sus vehículos tras la gasolina contaminada de compraron en la estación de servicio GALFOX que pertenece a la marca G500, muchos de los afectados no salieron muy contentos.
Y es que los representantes de la gasolinera ofrecieron cantidades menores a las que la mayoría pago por las reparaciones a su vehículo.
Uno de los afectados dijo que al llegar el pasado viernes a la audiencia, de inmediato le mostraron un cheque previamente llenado a su nombre por la cantidad de 2 mil 400 pesos.
«El problema es que yo gaste 3 mil 300 para reparar mi auto y ellos no querían darme el resto».
Explicó que el personal de la Procuraduría Federal del Consumidor les dijo que tenían el derecho de declinar la oferta, pero entonces tendrían que enfrentar un proceso legal que llevaría un largo tiempo para resolverse.
Entonces, los representantes de la gasolinera terminaron dándole un vale por 500 pesos de gasolina, algo que aceptó para no seguir batallando.
Sin embargo, reconoció que salió perdiendo 400 pesos, pues al final recibió 2 mil 900 y no los 3 mil 300 que gastó en la reparación de su unidad.
La misma situación vivieron muchos de los afectados, quienes al igual que él terminaron aceptando el ofrecimiento.